Cobarde


Tenía el rostro pálido, los ojos caídos y una inteligencia astuta que dedicaba al uso excepcional del control de sus semejantes. Victimismo, oscuro control y absurdos principios ceñidos exclusivamente a la necesidad de ser aceptado por el resto, justo antes de convertirles en esbirros.
Su barriga era redonda, su estatura no lograba  la media y su ego superaba a la más alta y enorme de las montañas. Se humillaba sin dudarlo, de ser necesario para su objetivo, manipulaba a las espaldas de los que llamaba “amigos”, apuntaba muy bien a su objetivo, sin prisas, hasta poder derrumbarlo sin problemas.
Tarde o temprano las cosas caen por su propio peso y la mentira, esa gorda mentira, destrozará su alma desde dentro.
Y el destino, en la hora justa, verá que no tiene nada que ofrecer.
Y todos carcajearemos al recordar su verdadero nombre de cobarde.
Y yo  sonreiré después de escupir sobre sus cenizas.

7 comentarios:

  1. Esa definición debería estar en "el diccionario de los escritores" :)

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  2. conocía a más de uno que encajan en la descripción, ahora prefiero desconocerles :P
    besotes! ^^

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    1. O más de una, seguro :P Gracias por comentar, Mara. Un besote ^^

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    2. Amore, he borrado la entrada de Imagine porque tanta imagina tardaba años en cargar en el PC de mi ahijado y he pensado que podría pasarle a más gente, pero leí tu comentario :D GRACIAS!!! mil besotes!!!

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  3. Qué paso?

    Jamás había leído algo así en tu blog. Pero aún así espero que la luz de tus sonrisas siga intacta, porque nadie merece que nos sintamos mal, ni siquiera las personas a las que queremos.

    El destino, como bien dices, acaba por poner a todos en su sitio siempre.

    Un abrazo muy grande Veritas!!

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    1. Todos tenemos borrones en nuestro pasado, algo que nos gustaría olvidar. Pero yo sé que si eso desapareciese no sería la misma persona que hoy escribe, así que me gusta recordar de vez en cuando. Es un buen ejercicio para recapitular lo emocionalmente aprendido.

      Gracias por tus palabras Rebeka. Un abrazo :)

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Gracias por colaborar con tus palabras.