¿Debemos desnudarnos ante los lectores?


Fuente

Hace un par de semanas hice una entrada sobre las 3 razones por las que vuelvo a los blogs y te pedí las tuyas. En muchas respuestas se afirmaba que "conectar con el autor" era primordial. Obviamente, para conseguir esto, el autor tendrá que desvelar ciertas partes de sí y compartirlas, compartirse, desnundándose ante los lectores. Así surgirá la conexión, pero también el riesgo de que alguien no encaje y lo pierda para siempre.  

Esto no es malo, por supuesto, mejor atraer lectores a tu bitácora que compartan tu estilo de vida, ideas e intereses que seguidores que se sientan cómo visitantes en otro planeta (por ejemplo, yo siguiendo un blog de SEO). Los últimos no suelen comentar, suscribirse o compartir. No molestan, pero tampoco nos interesan. 

Pero, ¿qué pasa cuando hablamos de un blog de escritor?
¿Contamos con las mismas reglas?


No puedo dejar de pensar en una presentación de Laura Gallego en la Semana Negra. Nunca había leído un libro suyo, pero me lo compré y asistí para conocerla un poco mejor. Cuando el entrevistador le preguntó qué porqué escribía fantasía ella dijo: "Porque puedo". Esa respuesta no me gustó. Me sentí incómoda. Tal vez porque poco antes había visto la entrevista de Howard Gardner, premio Príncipe de Asturias; cuando le preguntaron qué le había llevado a elaborar su teoría de la inteligencia, respondió con una gran cantidad de inquietudes, haciendo mención a la ayuda institucional y a la de otros profesionales, en lugar de: "porque puedo". Todavía no me siento cómoda hacia ese libro que compré y que nunca leí.

Por desgracia, cuando pretendes que te compren libros escribir no es solo escribir, también es vender. Y cuando no eres un autor indie, detrás de la publicación hay una gran cantidad de trabajo que no depende de ti. Para empezar, la primera persona que te dio una oportunidad (bien sea para editarte, corregirte y venderte como para leerte y recomendarte).

Otra experiencia reciente la encontré en un blog sobre autopublicación en la que entrevistaron a una autora publicada y autopublicada. Fue una entrevista que leí por alto, pero aún así pinché en los enlaces. Leí las sinopsis de sus libros y cuando llegué a su blog vi que se anunciaba para dar talleres de inteligencia emocional, hipnosis y PNL. Algún día os hablaré de la hipnosis clínica (que existe y funciona dependiendo del caso), para cuya aplicación es necesario un especialista. No quisiera tener que hablaros de la Programación Neurolingüística, pero con decir que es una falacia que carece de cualquier tipo de base teórica creo que es suficiente. Esa autora se engloba en la rama de profesionales que juegan con las ilusiones de la gente, vende, respaldada por lo alegal, un servicio inútil. Jamás me compraré su novela, por buena que sea, o se la recomendaré a alguien.

Significa esto que nunca leería un libro de un homeópata, adorador de artes oscuras que sacrifica gallinas o un exadicto a las drogas que no recuerda haber escrito Cujo... No, claro que no. Mientras no lo sepa antes de leerlo, si el libro me gusta, si la sinopsis me gusta o si me lo recomiendan, lo leeré. Pero si visito tu bitácora personal y descubro que me robas el pan cada mañana... Va a ser que no.

Yo he metido la pata del mismo modo en millones de ocasiones. Esta misma semana me descubro ante los lectores de Epidemia en la entrevista que Ana (blogera, escritora y artista en mayúsculas) me hizo este fin de semana. Tal vez les caiga en gracia, tal vez ni lean la sinopsis de Orquídea Blanca después de ella... Desnudarse es arriesgado.

Sin embargo, desnudarse de vez en cuando es inevitable, así que aquí va mi conclusión (mí punto de vista. El tuyo lo espero en los comentarios):

Si tienes un blog de autor, que así sea. Comparte aficiones, entrevistas en otros medios, lecturas, recomendaciones, inspiraciones, pedacitos de tu alma... Pero ten cuidado con tu forma de expresar las ideas y no mezcles churras con meninas. 
  • ¿Qué pinta una psicóloga hablando de psicología cuando en su barra lateral anuncia libros de vampiros? 
  • ¿Qué pintaría H.J Wells ofreciendo cursos de biología en su web cuando lo que quiere es vender La Guerra de los Mundos? 
  • ¿Alguien ha visto en la página de Pérez-Reverte que ofrezca sus servicios como corresponsal de guerra? ¿O a J.K. Rollwin ofreciendo servicios de traducción francés-inglés? Ya... Yo tampoco.

Ahora te toca a ti, porque necesito tu respuesta: ¿Alguna vez te ha echado para atrás conocer la vida personal o profesional de un autor? ¿Hasta qué punto debemos desnudarnos ante los lectores?


7 comentarios:

  1. Si la obra parece buena, lo de su vida no suele importarme siempre y cuando no sea de mente estrecha o tengas ideas demasiado alejadas a las mías y las haga publicas. Osea, que sea un racista, xenófobo y cosas así.
    Lo sepa o no, si su obra tiene tintes que no soporto, dejaría de leer por muy bestseller o bueno que sea.
    Creo que como todo en la vida, necesitamos empatizar con las letras y aunque no neguemos en ella siempre habrá mucho del autor.
    Luego hay otras veces en los que te lees un libro sin esperar nada, como me pasó a mí con Retrum, y después conoces a la persona y entonces ya te lees todos sus libros. xD
    Lo de desnudarse ante el lector está bien como complemento a nuestras historias, pero siempre dejando un espacio. No contar todo de nosotros. El elctor puede creer que le estamos mintiendo o que nos estamos creando un papel.
    De Laura Gallegosolo he leído La Emperatriz de los Etéreos, y me gustó mucho. Pero algo me pasa con la autora...no sé...o quizá sea el género!
    Un besazo, linda míaaaaa!!
    Si quieres cabaña, solo tienes que decirlooo! Yo te explico todo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, Beka, pero ahí ya estás dando por hecho que lees la obra (porque para saber si es buena, con la sinopsis no se puede). Y a mí a veces me ha pasado que se me han quitado las ganas...

      Del mismo modo, te digo que si no fuera por los blogs que visito no habría leído (porque no habría encontrado) a muchos autores que descubrí gracias a ellos y de los que me enamoré ^^

      Eliminar
  2. Me gusta el tema (y me gustó mucho la entrevista en Epidemía ;) ). Soy partidaria de ofrecer honestidad, pero también me preocupa la cuestión de ¿realmente a quién le importa lo que yo piense? XD Está claro que si me quedo ahí no voy a llegar muy lejos. Me gusta opinar, tengo mis ideas, pero no hacer bandera de ellas, ni pretender adoctrinar, que es algo que se ve mucho en las redes y me resulta muy cargante. Coincido en que he dejado de leer a algunos autores porque no me gusta su perfil social, también es que hay tanto que leer y tan poco tiempo que prefiero leer a quien me cae bien... En resumidas cuentas, que estoy disgresando más de lo habitual. Mi recomendación general sería dejarse ver, pero según lo que se vaya a decir, lo mismo es mejor quedarse callado :P
    Y desde luego, no es tu caso, porque siempre aportas reflexiones interesantes y sentidas. Yo no me las pierdo ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mí me importa lo que pienses jejeje. Soy súper cotilla, siempr elo digo, que me gusta saber qué inspira a los autores, por dónde se mueven, si teclean en el macdonals o con su hijo jugueteando a su lado... Me gustan los detalles.

      Pero tienes razón en que hay una gran tendencia a adoctrinar. Yo siempre intento dar mi punto de vista resaltado que es eso, mi punto de vista, pero me quedo alucinada con la cantidad de gente que suelta sus consejos como verdades irrefutables. Por culpa de mi profesión, cuando la gente habla de motivación o entrenamiento de la creatividad o control emocional... Es que a veces me pongo de los nervios. Sueltan verdades absolutas sin referencias, sin haberse leído estudios sobre el tema (que los hay para aburrir)

      Me apunto tu recomendación porque me encanta. Dejarse ver lo justo :)

      Gracias por pasarte y comentar ^^

      Eliminar
  3. Muy interesante, Veritas, yo que soy una bocazas en el blog tampoco sé no desnudarme, aunque con los años he aprendido a guardar parte de la ropa ;)
    Creo que prefiero no conocer a ciertos autores para no perderle el gusto a sus obras cuando son opuestos a mí, pero por otra parte, disfruto mucho más las historias de las personas que conozco bien y quizá por es en parte por eso, porque las quiero y no hablo de amigas, hablo de esas personas de las que he leído biografías y eran estrellas, pero ahora les veo humanas como por ejemplo el señor King ;) voy a leer el enlace.
    un superbeso!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. PD: acabo de leer el enlace, ES GENIALOSO. Amo a Steohen King, quizá eso me ayude a disfruta aún más su obra ^^ besotes!!!

      Eliminar
    2. Vas a tener que enseñarme, Mara. A mí me pasa lo contrario. Antes intentaba ser tan políticamente correcta que me controlaba un poco, ahora no filtro. Me hierve la sangre tantas cosas que me siento una bomba de relojería (aquí intento controlar, pero cada vez tengo menos pelos en la lengua). Será la edad :P

      Siempre intento poner enlaces de ese tipo, a artículos interesantes cuando puedo evitar simples páginas de información. Me alegra que te haya resultado entretenido.

      Mil besos, amiga.

      Eliminar

Gracias por colaborar con tus palabras.