Rutina examinal

En menor o mayor medida, todos tenemos una rutina una vez que llegan los finales. La mía está compuesta de unas cuantas conductas que este año pienso cambiar a mi gusto, que ya estoy muy mayor para andarme con tonterías. En cuanto a mi rutina examinal habitual:

Me niego a:

• Cerrar el blog por exámenes (aunque tenga que programar entradas).
• Dejar de visitar mis rincones favoritos (aunque sea con menos frecuencia).
• Dejar de parlotear con mis amigas (aunque sea por teléfono porque estamos hacinadas con apuntes en nuestras respectivas casas-cárcel y pegadas a nuestros escritorios).
• Dejar mis series favoritas por miedo a perder una hora.
• Dejar de leer antes de dormir.

Continuaré:

• Con el derecho a estar despeinada, en pijama y zapatillas.
• Con mis tres (o cuatro o los que surjan) cafés al día.
• Masticando chicles.
• Mirando al techo el tiempo suficiente como para perder el hilo de mis pensamientos.

Y una conducta a añadir en este nuevo periodo, empezaré a hacer algo, algo que nunca habría osado a hacer por ese dicho que nos persigue a todos "Piensa mal y acertarás", Pensar bien y estar en calma. Conociéndome, casi vale más...

P.S. Nunca he sido de las que creen en eso de la Ley de la Atracción tan extendido gracias a "El Secreto", pero por si acaso voy a empezar a focalizar un 7... un 7.... un 7... un 7.... un 7.....