Tengo frío.
Hace frío.
No tengo calefacción.
Tengo frío.
Llevo ropa térmica en casa.
Aún así tengo frío.
Y aún estamos empezando noviembre.
La idea de que todo tiene un principio y un final siempre me ha incomodado, pero ahora me siento bastante reconfortada con ella. Eso sí, nunca volveré a ser la misma. Nunca volveré a pensar que el jardín es más verde en casa del vecino. Nunca volveré a quejarme por las estupideces acostumbradas. Nunca volveré a indignarme cuando (¡Ja!), sé que no tengo buenas razones para ello. Nunca volveré a despreciar mis horas o las sonrisas que hacen de mi vida una vida digna de vivir. Nunca más olvidaré mi pequeña libreta en casa, tiene demasiados secretos escritos en aquellas tierras donde el tiempo empieza y termina cuando lo deciden sus habitantes.
Si las cosas malas no tuvieran final, sería la desesperanza. Si las cosas buenas no tuvieran final, no te esforzarías en mantenerlas, y llegaría el desánimo. Luego es bueno que en su justa medida todo tenga fecha de caducidad.
ResponderEliminarBesos.
Tienes toda la razón, Daniel. Y aunque no nos pareciese bien que tuviesen fecha de caducidad, es lo que hay así que hay que acostumbrarse jejeje. Un besote ^^
EliminarA veces las malas rachas dan paso a días de luz. Como dice Daniel, creo que es necesario sufrir un poco de vez en cuando para valorar lo que tenemos.
ResponderEliminarUn saludo y mucho ánimo con proyectos y sueños :)
Sí que lo es, pero cuando toca cómo j***. A ver, si es que soy muy quejica, y el catarro no me ayuda a ver con perspectiva, pero sé que las cosas irán a mejor. Muchas gracias por tu comentario, Ana. Un abrazo enorme.
EliminarMe da pena leer estas palabras amiga. Deberías estar viviendo con todas las comodidades. Espero que la mala racha acabe, que el sol vuelva a salir cada uno de tus días, que los buenos momentos te abracen a cada latido. Porque es lo que mereces Carmen.
ResponderEliminarTe mando miles de besos y abrazos norteños para alimentar tus sueños y proyectos!! No olvides tu sonrisa!!
Si tampoco necesito todas las comodidades, solo una ducha que funcione y una casa en la que a menos de 7 grados se ponga la calefacción jejeje. Un besote y muchas gracias por estar siempre ahí :)
EliminarTodo es mejor si lo valoramos, menudo otoño nos espera!
ResponderEliminarUn besito//
Pasate si quieres(;
http://palabrasendistancia.blogspot.com.es/
Tienes razón, Aino A. Me pasaré por ahí, pero vigila el spam. Si querías que visitase tu blog solo tenías que mandarme un correo que siempre respondo (tarde o temprano.. :P)
EliminarHola amiga, todos esos "nuncas" me suenan y haces bien en seguirlos, si puedes porque yo no desde luego. ¡Y vive!! kisses a lot
ResponderEliminarSiento que estos nuncas te suenen y más de esa forma. Pero te aseguro que yo los seguiré y, en esas ocasiones en las que a veces dejamos de valorar lo que tenemos porque lo vemos demasiado, creo que solo tendré que releer estas entradas.
EliminarUn besote y gracias por pasarte y comentar ^^
:)
ResponderEliminarMe gusta que actualices aunque tengas frío, me reconforta saber que estás ahí, aunque ese ahí suene tan difícil.
Te mando un abrazo enorme y pronto un mail, :)
mil besos!!!
XD Lo bueno es que hoy no tengo tanto frío. Para evitar congelarme en casa me pasé el día escribiendo en la biblioteca disfrutando de su calefacción (¡bien, conseguí terminar dos capítulos!) lo malo es que cierran a las 5...
EliminarUn besote^^